Comprar un plan de entrenamiento funciona, no tienes que lidiar con nadie, solo miras lo que tienes que hacer y ejecutas. Pero, ¿qué pasa si tienes consultas?, ¿qué pasa si tienes que planificar tu año de carreras?, ¿qué pasa si cambian tus planes?, ¿sabe el plan de entrenamiento las demandas de tu carrera, en realidad te conoce, sabe cómo produces tu energía, sabe si te falta fondo, sabe si tienes que trabajar tu capacidad aeróbica?, la respuesta es no, pero está bien, es un plan de entrenamiento nada más, puedes compararlo, puedes bajarte de internet, puedes hacer lo mismo que tu amigo que alguna vez entrenó y le fue bien. Pueda que te vaya bien, pero lo más probable es que no desarrolles tu máximo potencial.
Esto sí es importante, ¿por qué contratarías un coach con el que nunca te reúnes a planificar una carrera, con el que nunca hablas de tus objetivos? Peor aún, que no analice si estás o no cumpliendo con tu plan de entrenamiento, que no sepa cómo puedes mejorar, que no tenga respuestas si es que necesitas trabajar fuerza o resistencia. Que no sepa dónde entrenas y cuáles son tus horarios. Tu coach debe estar dispuesto a modificar tu plan de entrenamiento si es que necesitas porque viajas o porque tienes una vida ajetreada. Debe entender que lo principal, al menos para los atletas amateur, es su familia y trabajo y el deporte es un complemento. Tu coach debe comunicarse contigo para discutir ciertos entrenamientos. Debe saber cuándo presionar y cuándo darte algo de libertad. Debe saber cuándo y por qué hacerte tests, no hacerlos porque sí, en etapas del entrenamiento en los que son intrascendentes.
Tu coach te debe ofrecer respuestas coherentes en fisiología, nutrición, biomecánica e incluso a veces debe ser tu psicólogo (todo esto hasta cierto punto, luego, zapatero a su zapato). Pero para esto tiene que capacitarse e indudablemente también debe tener la experiencia, mucho mejor como deportistas y luego como entrenador.
Si piensas invertir en tu preparación, piensa primero en cómo sería tu comunicación con el coach, analiza si en verdad podrá crearte un plan para ti, totalmente personalizado. Y por último, cómo podría lidiar con la tecnología para saber de la mejor manera lo que estás haciendo y de esa forma pueda analizarse mejor tu planificación.
Si en verdad quieres mejorar tu rendimiento, aparte de tu compromiso (compromiso para entrenar, para esforzarte, para ser disciplinado, para ser consistente), necesitas el acompañamiento de un coach que esté dispuesto a caminar contigo en equipo para alcanzar tus objetivos. Si no tienes eso, el resto de cosas que giran alrededor del entrenamiento como masajes, nutrición, exámenes, descuentos, uniformes, nunca serán suficientes.